El filtro afectivo

Krashen, p. 30ff): La hipótesis del filtro afectivo (propuesta por Dulay y Burt) trata la función del "afecto", o sea, el efecto de la personalidad, la motivación, y otras variables emotivas, sobre el aprendizaje de idiomas. Las siguientes variables afectivas son las que aparecen en la literatura dedicada a la investigación del aprendizaje de idiomas.

  1. Ansiedad. Un bajo nivel de ansiedad facilita la adquisición de idiomas. Cuanto menos defensivo se sienta el aprendiz, mejor le irá en la adquisición.
  2. Motivación. Una fuerte motivación indefectiblemente ayuda a una mayor adquisición. Hay varios tipos de motivación. Por ejemplo, la motivación "instrumental" que se da cuando la lengua es una necesidad práctica. La motivación "integrativa" ocurre cuando se adquiere una segunda lengua para integrarse a un grupo o identificarse con él.
  3. Confianza en uno mismo. El aprendiz que tiene mayor autoestima y confianza en sí mismo tiende a adquirir más y mejor el segundo idioma.

Estos factores son más importantes para la adquisición subconsciente que para el aprendizaje consciente. Teóricamente, cuando hay barreras afectivas, el aprendriz tendrá un "bloqueo mental" y este no permite que los datos sean procesados (o sea, adquiridos) completamente, aun cuando el aprendiz los entienda. La adquisición es óptima cuando el aprendiz es motivado, confía en sí mismo, y siente poca ansiedad.


Dulay, H. y M. Burt. 1977. Remarks on creativity in language acquisition. En M. Burt, H. Duleay y M. Finnochiaro (eds.), Viewpoints on English as a second language, 95-126. Nueva York: Regents.

Krashen, Stephen D. 1987. Principles and practice in second language acquisition. Englewood Cliffs, N.J.: Prentice-Hall International.